Fuerza Estudiantil Salvadoreña "Jorge Arias Gomez": Rodrigo Avila vinculado al asesinato de diputados salvadoreños en Guatemala

jueves, 5 de marzo de 2009

Rodrigo Avila vinculado al asesinato de diputados salvadoreños en Guatemala

Fuente: Noticieros Televisa

GUATEMALA, Guatemala, feb. 21, 2009.- El Ministerio Público deGuatemala involucró a un ex diputado salvadoreño como parte de los autores intelectuales del plan que llevó al asesinato de tres miembros del Parlamento Centroamericano, también nacidos en El Salvador, un hecho registrado hace dos años en el kilómetro veintiséis de lacarretera que comunica a ese país con Guatemala.Trascendió que la Fiscalía guatemalteca también pretende determinarlos motivos por los cuales participó un ex director de la Policía salvadoreña en el interrogatorio a los cuatro policías que fueron capturados como autores materiales de los asesinatos y quienes igualmente murieron en una cárcel de máxima seguridad.

El político salvadoreño, Carlos Roberto Silva desaforado por el Congreso de su país, está actualmente detenido en el estado de California donde fue capturado por problemas migratorios. El desafuero apoyado por los miembros del partido ARENA habría sido el origen del asesinato de los miembros del Parlamento Centroamericano, según las líneas de investigación.

El Fiscal guatemalteco responsable de las investigaciones, Edwin Marroquín, confirmó que el ex parlamentario Silva sostuvo cuatro reuniones con el diputado Manuel Castillo Medrano, actualmente detenido, pocos días antes del 18 de febrero de 2007 fecha en que fueron secuestrados y posteriormente asesinados los miembros del PARLACEN (Parlamento Centroamericano) Eduardo Daubuisson, José Ramón González y William Pichinte, así como el piloto del carro en el que se transportaban para ciudad Guatemala, Gerardo Ramírez. Extraoficialmente se sabe que las investigaciones se extendieron adeterminar el porqué el entonces director de la policía de El Salvador, Rodrigo Ávila y actual candidato presidencial del partido oficial ARENA, aparece armado durante el interrogatorio que se les practicó a los policías Luis Herrera, Marvin Escobar, José López yJosé Gutiérrez, todos integrantes de la Dirección de Investigación Criminal, quienes murieron cuatro días después, supuestamente a manos de pandilleros en la cárcel de máxima seguridad El Boquerón.

Según trascendió durante este interrogatorio que se realizó en una de las oficinas del Ministerio de Gobernación de Guatemala, dirigido por el comisario venezolano Víctor Rivera, también asesinado hace diez meses, el exdirector de la policía salvadoreña participó en el cuestionario realizado a los cuatro agentes acusados del crimen portando un pistola nueve milímetros, algo que no permite la ley guatemalteca.

Por ahora el Ministerio Público prepara los trámites para solicitar al gobierno de los Estados Unidos enviar en calidad de extraditado al excongresista salvadoreño, Carlos Roberto Silva, para ser procesado en Guatemala.

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TODOS SOMOS PALESTINOS

Todos fuimos, somos, podríamos ser execrados por alguna imaginaria pertenencia étnica o alguna verídica adscripción cultural o política y seleccionados por ella para el gueto, el campo de exterminio, el Holocausto.

Todos fuimos, somos, podríamos ser vejados en nuestra propia tierra, discriminados en nuestra cuna, heridos constantemente por la mirada, la pedrada, el culatazo, el escupitajo de quienes se creen superiores por ser distintos y distintos por ser bestiales.

Todos fuimos, somos, podríamos ser expulsados de nuestro país y reducidos a hileras de pasos que deambulan de uno a otro campo de refugiados sin más horizonte que el alambre de púas.

Todos fuimos, somos, podríamos ser el hambre sin pan, la sed sin agua, la intemperie sin paisaje, la memoria sin recuerdos, la enfermedad sin medicina, la herida sin venda, la quemadura sin analgésico, la amputación sin anestésico, el dolor sin justicia, la muerte sin sentido.

Todos fuimos, somos, podríamos ser víctimas de la limpieza étnica, de los bombardeos contra la población civil, de las bombas de racimo, de la fosa común, de las guerras relámpago que oponen nuestra carne a los carros blindados y nuestros ojos a la invasión de la muerte.

Todos fuimos, somos, podríamos ser los huérfanos, los deudos, los sobrevivientes, los solitarios, los acorralados, sin más compañía que el recuerdo, sin más familia que la lágrima ni más hijo que el alarido ni más hermandad que el desvelo.

Todos somos, podríamos ser, fuimos, los amedrentados por el alarido de las sirenas y el anonimato de las maquinarias de la guerra, los soldados desconocidos, las bajas estimadas, los cuerpos contados o las tumbas sin nombres.

Todos somos, podríamos ser, fuimos, Noche y Niebla, pero también Plomo Fundido.

Todos fuimos, podríamos ser, somos, los culpables de vivir, los ejecutados por el crimen de tener razón, los muertos en aras del espacio vital, los sentenciados por los dividendos, los condenados en las rebatiñas por la energía fósil, los degollados en nombre del Dios del Amor, los satanizados por lo medios, los agredidos representados como agresores, los borrados por el eufemismo, los daños colaterales, los desechables, los prescindibles.

Todos fuimos, somos, podríamos ser los monstruos que ejecutan las atrocidades o que dicen vengar atrocidades cometiéndolas contra inocentes o las consagran con la indiferencia, la inactividad, la pasividad, la complicidad, el silencio.